¿NOS ENGAÑAMOS?

¿Nos atrevemos a hacernos esa pregunta?.

Si nos la hicieramos y tomáramos una hora de nuestro tiempo para analizar nuestro comportamiento, la forma de encarar la vida, nuestros afectos, en una palabra nuestro vivir cotidiano, me inclino a pensar que si, no hay duda del autoengaño.

Al vivir engañados por nosotros mísmos todo es mas facil pues no hay que encarar nada, la rueda sigue girando y un día sucede al otro sin necesidad de variar un ápice en nuestras vidas, hoy como ayer y mañana como hoy, un día mas, otro más, la rueda gira sin cesar.

No hay por que pensar, no hay por que luchar, no hay motivos para cambiar si damos por hecho que nuestra vida es aceptable, casi todo encaja y estamos haciendo lo que deseamos hacer, punto pelota podemos añadir y seguimos con nuestra falta de sinceridad porque no hay tiempo ni ganas siendo mejor dejarnos llevar por el rio que no cesa de correr, rápido, deprisa, nunca para hasta que llega al mar "que es el morir" que decía el poeta.

"Nuestras vidas son los rios que van a parar al mar que es el morir" Jorge Manrique a la muerte de su padre.

Para mi que hoy suele ser la gran mentira nuestro propio disimulo aceptanto situaciones dificiles o nada satisfactorias, ya que si fueramos sinceros con nosotros mísmos quizás fueramos criaturas que pugnan por mejorar o alcazar metas muy complicadas para alcanzar nuestros fines auténticos y puede llevarnos a encarar verdades no deseadas.

Nada es mas dificil que enfrentar la verdad de nuestras vidas, ¿hacemos lo que deseamos hacer o las circunstacias, la comodidad, el deseo de vivir en paz es lo que nos impide afrontarnos a nosotros mismos?.

Siempre hay disculpas para todo nuestro proceder, no tengo tiempo, no puedo, no deseo conflictos, es mi obligación, soy como soy, decenas de justificaciones para no pararnos y pensar si vivimos una vida de engaño, falsa, conformista en suma pero no la que en realidad deseariamos siendo sinceros con nosotros mísmos.

A solas, sin nada que nos entretenga, pararse y hacer un auto examen del ser que somos es dificil, da miedo, mejor lo dejamos para otro momento y continuamos con las rutinas.

Las personales circunstancias aceptables la mayoria de las veces nos arrastran a cotinuar nuestra propia farsa impidiéndonos pensar que la vida es corta, que deberiamos plantearnos ¿que es lo que realmente queremos o deseamos para mejorarla?, y lo más dificil ¿que hacemos para conseguir esa mejora?.

Rodeados de engañifas, televisión, ordenadores, smartphones, es facil no pensar, seguir siendo conformistas e infelices, aceptar lo que hay sin hacer nada para cambiarlo y nuestros días, únicos e irrepetibles días, van pasando incesantemente sin ser casi conscientes de ellos.

Desde la infancia nos han enseñado a reprimir nuestros deseos, ir a la guarderia llorando o pataleando, a la escuela siendo casi bebes, sin ganas, a hacer deberes en casa, a tener diversas actividades que llenan nuestro día y dan tiempo a nuestros progenitores, judo, natación, idiomas, etc. y tras periodos de auténtica rebeldia llega la aceptación, el no pensar en nuestro vivir cotidiano, tener hijos sin estar preparados o sin dinero, comprar un piso porque es lo adecuado, trabajar-dormir, un día y otro más, no parar, no pensar, seguir, relegar todo aquello que nos agobia o siguiendo el ejemplo de Scarlette O´Hara en "Gone with the Wind" decirnos "mañana lo pensaré" hoy no tengo tiempo. 

¿Acaso alguien se para, toma su tiempo y piensa que es su vida o en las decisiones que tomará para mejorarla?.

Lo dudo.

Infinidad de personas a mi alrededor están haciendo algo que en el fondo no desean.
Se nos va la vida y sin darnos cuenta somos ancianos que viven o han vivido una realidad insatisfactoria.

Dichoso aquel que hace lo que realmente desea hacer sin perjudicar o hacer daño a nadie, que es feliz caminando y tomando las decisiones adecuadas para disfrutar y ser consciente de hacer lo que quiere, lo que le pide su cuerpo o su mente, sin ataduras ni compromisos agobiantes, vivir cada día que Dios nos otorga como si fuera el último, una aventura grata y diversa que pueda sorprendernos en cada momento.

Siempre me ha gustado pararme, pensar, ¿tengo la vida que deseo?, ¿si o no?, he ido cambiando y ante todo he procurado ser libre dentro de las responsabilidades hacia mi o las personas de mi entorno.
Egoismo dirian muchos, no lo siento así pero en el fondo me da igual que cada cual piense lo que quiera y siga haciendo su vida sin entrometerse en las ajenas.

Nunca he pertenecido a grupo, asociación, credo, o entorno religioso que tomara las decisiones por mi, que marcara el camino a recorrer, no mire el camino lo ando yo y si me confundo o me pierdo rectifico, me paro, pienso y desando lo que haga falta hasta encontrar la trayectoria que me guste recorrer.

Ser uno mísmo es dificil, replantearnos nuestra vida no digamos, incomprensión o aislamiento asegurado, pero al final sabremos que
hemos sido fieles a nosotros mismos, a nuestro criterio, a nuestra ética personal que no tiene por que coincidir con la que nos rodea. 

Sinceridad, dolor y aislamiento casi asegurado pero a la vez autenticidad muy grata que nos permite ser felices con mayor frecuencia de lo esperado, siendo conscientes de que vivimos, de que tenemos tiempo para hacer lo que nos plazca, ver a nuestros amigos, charlar, relajarnos, replantearnos que hacer o que no hacer, vivir en suma como auténticas personas únicas e irrepetibles cuyo tiempo es corto para malgastarlo siendo inconscientes de nuestras propias vidas o lo que es peor engañándonos una y otra vez hasta llegar al mar.

el gatufo